Cuando se comenzó a delinear el plantel de Boca Río Uruguay Seguros para la presente temporada, entre tantos nombres que iban y venían surgió el de Juan Pablo Hatrick. El opuesto de 31 años oriundo de la ciudad de La Plata, había dejado una muy buena impresión en su paso por el club durante la temporada 2009/2010 y la posibilidad de que pueda cumplir otros roles dentro de la cancha no hicieron dudar al cuerpo técnico en contratarlo para pelear un puesto con Marcos Domínguez o para jugar como punta en caso de ser necesario.
¿No dudaste mucho en volver a ponerte la camiseta de Boca?
Cuando estuve anteriormente conocí muy buena gente, Boca es un club donde se puede trabajar muy cómodo junto a un grupo de jugadores de muy buena calidad y por supuesto que el hecho de estar en casa todos los días pesa en la balanza, así que recibí la propuesta y la acepte con mucho gusto.
Viniste a disputar el puesto con un jugador de renombre y una trayectoria Internacional muy importante como Marcos Domínguez. ¿Te animaste al desafío sabiendo que no la tenias fácil?
Si, claro. Me animé porque confío mucho en mis condiciones y aparte soy una persona que me gustan los desafíos, siempre traté de remarla y esta vez no fue la excepción; Marcos es un jugador de un nivel muy alto con el cual tenemos una competencia muy sana, cada cual aporta lo suyo y luego el técnico decide quien juega.
¿Sentís que por ahora ganaste la pulseada?
Para nada; acá la competencia es difícil porque somos un plantel largo y con jugadores de grandes condiciones. A mí me gusta dar todo como te decía antes desde el lugar donde me toque estar, sea adentro o afuera de la cancha. Decir que nadie tiene el puesto asegurado es un poco ponerse el cassette, pero es la realidad, acá si te dormís hay otro afuera que quiere jugar y te come, por lo que no te podes relajar nunca.
Hatrick mas allá de su destreza física y su potencia, también se caracteriza por su temperamento para sobreponer situaciones complicadas dentro del juego. A principio de temporada en un partido de exhibición ante el poderoso Sada Cruzeiro de Brasil, ingresó desde el banco y le cambió la cara al equipo. Ante las caras de asombro de los jugadores Brasileros no lograban entender como un jugador mucho más bajo de la media habitual de un opuesto conseguía perforar una y otra vez el bloqueo rival.
¿Los jugadores del Sada Cruzeiro no se van a olvidar fácil de aquel petiso que ingresó y los volvió locos?
Para mi jugar al voley es muy motivante, encima jugar en Boca mas aún y si tenes que enfrentar a equipos tan poderosos siempre sacas un plus extra. Yo lo vivo de una manera muy especial, me la paso arengando a mis compañeros, grito los puntos como si fueran el último de mi vida y la verdad que en ese partido me salieron todas. Con el aliciente que arranqué en el banco y cuando el técnico me puso me los quería comer crudos.
¿Fue bisagra aquel partido donde se le ganó a un gran equipo mas allá que sea un amistoso, para darse cuenta que Boca Río Uruguay Seguros está para cosas importantes?
Si, seguro. Si bien a principio de temporada nos pusimos objetivos por etapas, haber tenido un gran nivel de arranque y nada menos contra el Sada, nos dimos cuenta que manteniendo ese nivel y trabajando a conciencia podemos llegar bien lejos en la liga.
El inminente comienzo de la Copa ACLAV y la difícil misión de mantener el título también es tema de conversación y de saber como se prepara el equipo para el certamen.
El año pasado Boca no era uno de los principales candidatos y sorprendió alzando la copa. Este año con algunas bajas sensibles entre selección y lesiones pareciera lo mismo. ¿Están preparados para otro batacazo?
Si, por supuesto. Es verdad que estamos en inferioridad porque tres jugadores titulares no estarán en la copa y eso nos hace cambiar un poco el esquema de juego, pero vamos a ir con todo por la copa confiando en el gran plantel que tenemos. Veremos que pasa.
No pararon nunca de entrenar y tuvieron viajes largos. ¿El cansancio comienza a jugar a esta altura de la temporada?
No tanto. La preparación física que tenemos es muy buena y eso hace que nos podamos recuperar rápidamente, a parte estamos muy compenetrados en entrenar y jugar junto a un grupo que mas allá de sus cualidades técnicas tenemos mucha onda entre nosotros, cosa que ayuda mucho. El cansancio queda en un segundo plano.
Hace pocos días en el partido ante MSM Bella Vista, Hatrick fue la figura del encuentro y logró una estadística poco habitual, consiguió marcar siete puntos de servicio (cuatro de ellos de manera consecutiva) lo que hizo que el público local explote en un aplauso de alivio cuando Juan Pablo perdió el saque.
Se te nota con mucha confianza, no solo en los partidos sino también en los entrenamientos. ¿Estás en tu techo o podes llegar a dar algo más?
Estoy muy bien de la cabeza y eso es fundamental, estar cerca de casa, jugar en un club como Boca y tener un grupo de amigos jugando a mi lado hace que uno solo piense en entrenar y jugar, no se si será mi techo, siempre pienso en dar un poco mas y ojala pueda seguir creciendo.
En el 2008 cumpliste el sueño de ser campeón metropolitano con tu Club, Universitario de La Plata ¿Qué te queda por cumplir?
Ganar la liga, sin dudas. Hace algún tiempo viendo como estaba Bolívar con respecto a los demás parecía un sueño inalcanzable, pero hoy en día todo se está emparejando y nosotros si bien respetamos a los grandes equipos no nos creemos menos que nadie, entonces como soñar es gratis, por que no hacerlo, no?
¿Y la selección Nacional?
No creo. Si llegase a venir estaría encantado, pero hay un grupo de jóvenes en un gran nivel que se ganaron un lugar en la selección muy merecidamente.