Ahora mismo uno de los grandes problemas de los ordenadores, tanto portátiles como de sobremesa, es el calentamiento que se produce cuando se utilizan muchas horas seguidas. Un proyecto europeo de investigación está desarrollando un sistema basado en nanoconmutadores que podría terminar con el incómodo y peligroso calentamiento de las computadoras.
El estudio de las conocidas como estructuras de túnel magnético ha permitido, por ejemplo, crear sensores magnéticos ultrasensibles para la lectura de datos almacenados en discos duros o para crear celdas de almacenamiento magnético en chips de memoria magnética no volátil (aquellas que no requieren de electricidad continua para almacenar la información).
Ahora, gracias a este desarrollo estas complejas estructuras se podrán utilizar para "controlar los voltajes y corrientes termoeléctricas en los circuitos electrónicos" explican desde el Servicio de Información en I+D Comunitario.
Estas estructuras de túnel magnético están formadas por dos capas magnéticas separadas por una capa aislante muy fina. Simplemente controlando la magnetización de las dos capas se puede controlar igualmente el flujo de corriente eléctrica a través de la estructura; y no solo eso.
El equipo de investigadores ha conseguido demostrar que también se modifica el flujo térmico, la cantidad de calor que fluye por la estructura, lo que significa que en el futuro se podrá controlar y evitar el sobrecalentamiento al que estamos habituados.