La nave enviada por la NASA, Messenger, ha revelado importantes datos acerca del misterioso planeta Mercurio, el más cercano al Sol y del que se sabe más bien poco. Al menos así era hasta que la sonda espacial Messenger ha empezado a enviar información relevante sobre la historia geológica de Mercurio.
La revista especializada Science ha dado a conocer los últimos hallazgos de la sonda, entre los que destaca la importante actividad volcánica del planeta, concretamente en las latitudes más altas de su polo norte. En esta zona de Mercurio se expulsó tanta lava que, por citar un ejemplo, hubiera podido cubrir el 60% del territorio continental de Estados Unidos, e incluso enterrar un estado como Texas a más de 6 kilómetros de profundidad.
Además de las tormentas magnéticas que soporta Mercurio, al estar tan cerca del Sol, y que destruirían la Tierra, los científicos también saben gracias a la sonda Messenger que hace unos 4.000 millones de años, su polo norte estaba totalmente sepultado por lava. A estos datos se suma también la extraña atmósfera ionizada de Mercurio, y el hallazgo de un grupo de científicos de la Universidad norteamericana de Brown, donde se revela que las lisas planicies que cubren buena parte del planeta están provocadas por los volcanes.
A todos estos datos hay que añadir también que la composición de la superficie de Mercurio es diferente a la del resto de planetas terrestres. Si lo comparamos con la Tierra o la Luna, descubrimos que el planeta más próximo al sol tiene mucho más azufre que estos dos. Esto ha dado lugar a una de las teorías más defendidas por los científicos, que sugiere que Mercurio podría haberse formado con unos pocos materiales precursores.
Unos sorprendentes hallazgos que nos acercan cada vez más a este interesante y desconcertante planeta, claves para conocer mejor los secretos de nuestro Universo.