Mucho se ha hablado en los últimos años de este tipo de medicamentos, tanto por sus ventajas como por sus inconvenientes, sin embargo los expertos en medicina aconsejan utilizar estos fármacos con sumo cuidado y tan sólo cuando un experto lo recomiende, ya que no son eficaces para todas las dolencias.

Según la Organización Mundial de la Salud este tipo de medicamentos se fabrican con el mismo principio activo, la misma composición y forma farmacéutica que el de la marca original. Bien utilizados y siguiendo las recomendaciones de nuestro médico, los medicamentos genéricos tiene una importante ventaja y es su precio, ya que este tipo de medicamentos no requieren inversión en investigación, desarrollo y promoción. Por otra parte cumplen los mismos registros sanitarios que los medicamentos de otras marcas y tienen la misma eficacia sobre el organismo.

No obstante, han despertado importantes debates entre los expertos en salud, y uno de los más importantes es la falta de investigación y desarrollo de los laboratorios farmacéuticos. En la actualidad se calcula que los productores de fármacos originales producen también cerca de un 50% de medicamentos genéricos que son exactamente iguales pero con diferentes nombres.

Un detalle muy importante que deben tener en cuenta los pacientes es que este tipo de medicamentos puede tener una presentación diferente, en otros colores, sabores, formas o tamaños, pero la fundamental es que la sustancia activa sea la misma, y no sea altera, ya que esto puede dar lugar a confusión entre los pacientes, e incluso e algunos casos puede provocar intoxicación. Los pacientes tienen en cuenta sobre todo el nombre del producto, pero no en el principio activo que es realmente lo importante. Aunque conviene saber que no todos los medicamentos tienen su correspondiente genérico, así que algunos deben ser adquiridos directamente en el laboratorio que los produce.