Alerta niños: cómo actuar ante la ingesta de cuerpos extraños
Por tk
  
Martes, 27/09/2011
Suele decirse que los accidentes más graves ocurren en el hogar. Es el caso de anillos, agujas, medallas y hasta pilas que pueden ser aspirados o tragados por los niños y provocar muerte por obstrucción o problemas respiratorios crónicos. Qué hacer para evitar cuadros fatales

La aspiración o ingesta por parte de bebés y niños de monedas, medallas, agujas, pilas y fragmentos de juguetes, entre otros cuerpos extraños, son una de las principales causas de muerte por asfixia en menores de 3 años y, por lo tanto, resultan motivo de preocupación entre los especialistas del ministerio de Salud provincial que llamaron a los adultos a tomar medidas que prevengan estos cuadros.

Datos internacionales estiman que 30 de cada 100 mil chicos sufre de aspiraciones o ingestas de cuerpos extraños y, según datos de los Estados Unidos, en ese país provocan unas 160 defunciones anuales.
Por eso, establecimientos pediátricos de la cartera sanitaria provincial ya adhirieron al proyecto Sufy Safe, una iniciativa internacional de la que forman parte 26 países y más de 60 instituciones de salud, que busca establecer un registro de estos casos, recopilar datos sobre asfixia en todos los países, elaborar estadísticas, proporcionar un perfil de riesgo para cada producto y tomar medidas de prevención.

Los especialistas de la Unidad Central de Endoscopía del hospital provincial Sor María Ludovica de La Plata señalan que de las 500 endoscopías que realizan al año, casi un 25 por ciento se ejecutan bajo la sospecha de que el niño ingirió o aspiró un cuerpo extraño.

“Lo más peligroso es la ingesta de las llamadas pilas botón, las que se usan para relojes, porque por su composición son capaces de perforar el tabique nasal o los órganos digestivos en pocas horas”, advirtió la especialista Graciela González Francos, miembro de la Asociación Argentina de Otorrinolaringología y Fonoaudiología Pediátrica, y enfatizó que esto constituye una verdadera emergencia que requiere atención médica inmediata.

Además de la historia clínica y el examen físico, los médicos deben realizar estudios complementarios cuando existe la posibilidad de aspiración, es decir cuando el elemento queda en la vía aérea, al igual que en casos de ingesta, que ocurre cuando el cuerpo extraño queda en el tubo digestivo.

Darío Fajre, jefe de la Unidad de Endoscopía del Ludovica agregó que uno de los procedimientos más reveladores en estos casos es la endoscopía “porque no sólo permite recorrer la vía aérea y el tubo digestivo para localizar el objeto en cuestión, sino también extraerlo y liberar al chico de ese elemento que puede resultar mortal”.

El especialista advirtió que el pico de casos de este tipo se da en niños de entre 1 y 3 años, etapa en la que se llevan todo a la boca y no son concientes del peligro. Por eso, los especialistas recomiendan a los padres evitar dejarles objetos pequeños a su alcance, píldoras, bijouterie o alhajas y no ofrecerles productos comestibles como maníes, caramelos duros o semillitas de girasol sino han superado el tercer año de vida.

“Hay casos alarmantes como el de una nena que recibió una medallita de regalo en la calle, se la puso en la boca, la aspiró y le obstruyó la vía aérea. Los papás no se dieron cuenta de inmediato y la trajeron al hospital muchas horas más tarde. Si bien pudimos salvarla el riesgo de asfixia fue muy serio”, contó Safre.

Los expertos señalaron también que los elementos extraños que se aspiran o tragan pueden quedar alojados en algún sector del aparato respiratorio o digestivo y permanecer allí largo tiempo, lo que puede provocar secuelas irreversibles, por ejemplo en el pulmón. Más habitual de lo que se cree, estos cuadros reciben el nombre de Síndrome del Cuerpo Extraño Olvidado.

“Hay que prestar atención cuando un chico presenta broncoespasmos o neumonías recurrentes porque pueden ser producto de la aspiración de un cuerpo extraño”, agregó González Franco.

Signos de alarma
Para Safre es clave que tanto los médicos como los adultos que tienen niños a cargo eleven el nivel de alerta cuando observen que un chico sano pasa súbitamente al estado de enfermedad, con signos respiratorios o digestivos relacionados con la ingesta o aspiración de elementos.

Sofocación, arcadas, tos y ahogos son síntomas frecuentes en estos casos que deben motivar la consulta inmediata. También pueden presentarse vómitos, carraspera y silbidos en el pecho. En cualquier caso, acotó el especialista, “la recomendación es recurrir a un servicios de emergencia y no introducir los dedos en la boca del niño porque esto puede empeorar a aún más el cuadro”, advirtió Safre.

Las autoridades sanitarias instaron a la comunidad a tomar dimensión del problema y prevenir que un chico sano muera súbitamente por asfixia.

“A los niños hay que supervisarlos muy de cerca y enseñarles que hay cosas que no pueden comer ni llevarse a la boca, a la nariz ni a los oídos”, agregó González Franco, e instó a los padres a revisar si los juguetes son apropiados para la edad que tienen, corroborar que no se desarmen fácilmente y que no haya objetos pequeños susceptibles de ser ingeridos al alcance de los más pequeños.


Por tk