Un planeta a 36 años luz podría albergar vida.
Científicos del Instituto Max Planck de Astronomía han identificado un planeta potencialmente habitable a 36 años luz de la Tierra. Se llama HD85512b y gira alrededor de una enana naranja en la constelación de Vela. Ha sido descubierto utilizando el instrumento High Accuracy Radial Velocity Planet Searcher (HARPS) instalado en el Observatorio Europeo del Sur (ESO) en Chile.
El nuevo cuerpo celeste tiene cerca de tres veces y media la masa de la Tierra y se encuentra en la franja de habitabilidad de su estrella, es decir, ni demasiado cerca ni demasiado lejos para permitir la existencia de agua líquida en su superficie. Su tamaño indica también que la atmósfera que lo rodea podría contener oxígeno y nitrógeno en lugar del hidrógeno y el helio que suele abundar en las atmósferas de los planetas gigantes.
El planeta presenta otras ventajas. Puesto que su órbita es casi perfectamente circular y estable, es previsible que el clima también lo sea. Además, el sistema planetario del que forma parte es mil millones de años más antiguo que la Tierra, lo que significa que ha tenido tiempo más que suficiente para que la vida se haya desarrollado. A esto se añade que su estrella es más madura que nuestro Sol y, por lo tanto, menos propensa a desarrollar ciclos de actividad violenta que desestabilicen el planeta.
Con este son ya tres los exoplanetas identificados por los astrónomos que podrían albergar vida.