....me di el gusto...
Por carlosgranate
  
Viernes, 25/02/2011
Armandinho vuelve a traer su reggae playero a la avenida Corrientes

El artista brasileño regresa al Gran Rex el 1 de abril para presentar Volumen 5, su último álbum, junto a una recorrida por todos sus éxitos.

¿Cuántas personas en el mundo son incapaces de disfrutar un buen reggae a la orilla de la playa cuando cae el atardecer? ¿Quién alguna vez no se dejó llevar y empezó a moverse lentamente al escuchar alguna canción de ese ritmo que un tal Bob Marley popularizó ­en algún parador de cualquier costa del mundo?

El próximo primero de abril volverá al Gran Rex, luego de una exitosa experiencia en 2008, Armandinho, el artista brasileño que gracias a la combinación del reggae, el surf y la playa consiguió crear un estilo propio, pegadizo y realmente adictivo para los amantes del género.

En esta ocasión Armandinho (Antonio Armando), de 41 años, presentará Volumen 5, el quinto álbum de su carrera (cuarto de estudio) pero también el resto de sus temas más conocidos, esos mismos que hace dos años la gente no paró de cantar durante un show que se extendió por casi tres horas.

En diálogo con Cronista.com, Armandinho contó qué tipo de show podrán disfrutar cuando desembarque en nuestro país en el inicio del próximo mes.

“Voy a presentar mi último disco, Volumen 5, pero también haré un repaso por toda mi carrera ya que hubo mucha gente que no pudo venir la vez pasada y que, quizá, quiere también escuchar mis temas anteriores”, comentó en un ‘portuñol’ pausado pero claro.

Casado con Haya y padre de una pequeña hijita (Antonia, de 4 años), el cantautor, nacido en Porto Alegre, en el sur de Brasil, un 22 de enero de 1970, empezó a transitar el mundo de la música desde muy chico, influenciado por su padre, quien le enseñó los primeros acordes en una guitarra acústica.

“A los 9 años empecé a tocar gracias a mi papá, quien lamentablemente ya no está conmigo. Fue una persona extraordinaria. Desde siempre, en mi casa se respiró música. Crecí escuchando diferentes artistas latinoamericanos gracias a él y a mi mamá”, recordó.

Por el lado materno, el pequeño Armandinho conoció a Caetano Veloso, Vinicius de Moraes y hasta Chopin. Por su papá, en cambio, folklore argentino, Mercedes Sosa y música latinoamericana.

“Escuché muchas cosas. Pienso que la música cambia y varía de acuerdo a los estados de ánimo de las personas. Unos días quizá se puede escuchar un artista determinado y al otro, un autor completamente distinto. Por eso creo que tampoco puedo encasillar a mi música en reggae, pop o rock, porque soy una mezcla de todo eso”, aseveró.

A Armandinho lo acompañan hasta hoy algunas de las primeras canciones que hizo en su vida. “A los nueve años compuse ‘Ursinho de dormir’ un tema que, hasta el día de hoy, sigo tocando. También música de mi primera banda, temas que compuse en la adolescencia y unos años más tarde. Por eso creo que mi música es aceptada también por gente de cualquier edad”, consideró.

“Mi música refleja varios momentos de mi vida. Estoy influenciado por mi familia y amigos, por eso creo que cada una de mis canciones son muy personales, muy mía”, añadió Armando, quien se encuentra a la espera de su segundo hijo.

Gracias a la tranquilidad y calidez de sus palabras, la música, el surf y su próximo show en Baires pasaron por un momento a segundo plano y Armandinho, como buen brasileño, empezó a hablar de fútbol.

Torcedor (hincha) de Internacional de Porto Alegre, el músico es admirador de varios jugadores argentinos.“En Inter juegan D’Alessandro, Bolatti, Guiñazú y ahora Cavenaghi. Podría decirse que Inter es el equipo brasileño ‘más argentino’ de todo Brasil”, comentó entre risas.

Contó que se desempeña como volante central a la hora de jugar un partido con sus amigos y que uno de los mejores futbolistas que vio en su vida fue otro argentino: Fernando Redondo.

“Siempre me gustó Redondo, por su elegancia a la hora de jugar, siempre con la cabeza levantada. La rivalidad entre argentinos y brasileños es sólo futbolística”, añadió.

A la hora de volver a hablar de música, reconoció haber estado “muy tenso” antes de comenzar su primer show en Buenos Aires, allá por el inicio de 2008.

“Tuve mucha tensión al principio pero después me fui soltando cuando me di cuenta que la gente conocía mi trabajo. Yo realmente no sabía que aquí me tenían tanto cariño y que se conocía tanto mis canciones. La gente cantó todas, hasta las de Semente, que era el disco nuevo por aquel entonces. Fue una gran satisfacción para mí”, contó con la voz entrecortada.

A la hora de preguntarle por qué cree que tantos argentinos conocen su música, Armandinho reconoce que su música es muy escuchada en la zona sur de Brasil y en ciudades visitadas por miles de argentinos año tras año como, por ejemplo, Camboriú.

A la hora de hacer una comparación con aquel primer recital en Buenos Aires, Armandinho adelantó que “ahora se verá un espectáculo más completo” gracias a que vendrá con toda su banda a la Argentina.

“El show contará con otra vibración. La gente contagia y transmite otras vibraciones y eso hace que las canciones, muchas veces, tengan un ritmo un poco más acelerado respecto a cómo fueron grabadas. No sé si es mejor o peor pero lo que sí sé es que a la gente siempre le gustó mucho esas variaciones que hacemos y esa energía nosotros la percibimos desde arriba del escenario”, detalló.

Armandinho, amante del surf, tiene una ventaja envidiable respecto a muchas bandas a la hora de empezar a grabar su nuevo material ya que posee un estudio de grabación en su propia casa, ubicada en la ciudad catarinense de Itajaí, en Praia Brava, a la orilla del mar.

“Tuve la chance de grabar todo en mi casa. Por suerte podemos hacer todos los ensayos y arreglos con una muy linda vista de fondo. De todos modos, lo importante es que toco para que la gente pueda identicarse con mi música”, añadió.

Muchas veces por simple casualidad o guiño cómplice del destino, la gente conoce nuevos artistas en diferentes lugares. Sin el mar de fondo, el primer día de abril próximo le dará a Armandinho la chance de volver a mostrar su música en Argentina y a los amantes del género, la oportunidad de disfrutar de un artista completo, maduro, que encontró en la combinación del surf y el mar, la clave para mostrar mediante armonías pegadizas toda la alegría que, como buen brasileño, lleva por dentro. En definitiva, ¿quién es incapaz de moverse un poco cuando escucha un buen reggae?.


Por carlosgranate