El proyecto de la empresa Chemtest Argentina, instalada en el Campus de la UNSAM, será financiado por la Agencia Nacional de Promoción de la Investigación, el Desarrollo Tecnológico y la Innovación (Agencia I+D+i) y permitirá que el país cuente con una herramienta que mejora el manejo de la pandemia.
Una empresa instalada en el Campus de la Universidad Nacional de San Martín (UNSAM), Chemtest, se encamina a desarrollar y producir el primer test argentino de detección rápida del nuevo coronavirus SARSCoV-2 basado en antígenos, una herramienta que por el momento se importa. Son fáciles de usar y revelan los resultados en 20 minutos.
A través del Fondo Argentino Sectorial (FONARSEC), la Agencia Nacional de Promoción de la Investigación, el Desarrollo Tecnológico y la Innovación (Agencia I+D+i), financiará con 12,5 millones de pesos el desarrollo integral del kit a cargo de la empresa Chemtest Argentina, ubicada en el partido bonaerense de San Martín
«Este financiamiento nos permitirá sumar un nuevo producto a nuestra línea de test diagnósticos para COVID-19. Nos alegra contribuir con el diseño y manufactura de un nuevo kit íntegramente nacional», afirmó el director de Chemtest, Juan Manuel Capece.
Los test de antígenos para SARS-CoV-2 revelan directamente la presencia del virus a través de la identificación de las proteínas que recubren su material genético en muestras de hisopado nasal y son útiles para puestos de testeo descentralizados, sin infraestructura para diagnóstico molecular, lo cual agiliza, mejora y potencia la capacidad de rastreo.
Las muestras se toman con hisopos en operativos territoriales y luego, en vez de ir al laboratorio para procesarlas, se tramitan en el propio lugar, de manera descentralizada y en tiempo real.
«La implementación de los test de antígenos fortalece la estrategia de detección precoz y aislamiento de los casos confirmados de manera inmediata, minimiza la transmisión del virus; y descomprime la tarea de los laboratorios», puntualizó Diego Comerci, investigador del Instituto de Investigaciones Biotecnológicas (IIB) de la UNSAM y director científico de Chemtest.
La empresa se creó en 2015 y desde el inicio de la pandemia de COVID-19 ha sido capaz de desarrollar un test molecular de amplificación isotérmica y otro serológico (de anticuerpos).
Para el desarrollo del nuevo test antigénico, bautizado CHEMSTRIP COVID19 AG, la compañía cuenta con la colaboración del IIB de la UNSAM y de la start-up BIOINNOVO, con quienes están desarrollando antígenos recombinantes, anticuerpos monoclonales y sueros.
«Para que funcione el kit de detección de antígenos se requiere de por lo menos dos tipos de anticuerpos: monoclonales para la captura del virus y policlonales para disparar una reacción química que haga visible su presencia. Ahora estamos trabajando en su producción», explicó Comerci.
El uso de los test de antígenos generó en Argentina y en todo el mundo una mejora enorme en el manejo de la pandemia, añadió.
«Que estos test sean de producción nacional va a servir para cerrar la brecha que existe entre la calidad de los recursos humanos y las capacidades industriales del sector salud en Argentina», concluyó Comerci.
Ref: Agencia CyTA-Leloir