Un hombre se infecta 2 veces con el SARS-CoV-2 pero genéticamente diferentes
Por buenapraxis
  
Miercoles, 14/10/2020
Un varón de 25 años residente en el estado estadounidense de Nevada parece ser la primera persona que se ha infectado dos veces con el SARS-CoV-2, aunque de dos virus genéticamente diferentes, ya que los análisis genómicos entre cada variante asociada mostraron diferencias significativas. Además, la segunda infección fue sintomáticamente más grave que la primera.

Esta persona dio positivo en la primera PCR para SARS-CoV-2, el 18 de abril de 2020 y, un mes después, negativo en dos test realizados durante el seguimiento en mayo de 2020. Sin embargo, el 5 de junio de 2020 volvió a dar positivo después de que el 28 de mayo volviera a presentar síntomas -fiebre, dolor de cabeza, mareos, tos, náuseas y diarrea-.

El estudio que se publica en Lancet Infectious Diseases plantea preguntas sobre cuánta inmunidad se puede desarrollar contra el virus.

Los investigadores explican que la discordancia genética de las dos muestras de SARS-CoV-2 era mayor de lo que podría explicarse por la evolución in vivo a corto plazo. Estos hallazgos sugieren que el paciente fue infectado por SARS-CoV-2 en dos ocasiones distintas por un virus genéticamente distinto.

Los científicos dicen que el paciente contrajo coronavirus dos veces, en lugar de que la infección original se volviera inactiva y se recuperara posteriormente. Una comparación de los códigos genéticos del virus tomado durante cada episodio de síntomas mostró que eran demasiado distintos para ser causados por la misma infección.

«Nuestros hallazgos indican que una infección previa puede no proteger necesariamente contra infecciones futuras», dijo el Dr. Mark Pandori, de la Universidad de Nevada (EEUU).

Por su parte el Dr. Marcos López Hoyos, Presidente de la Sociedad Española de Inmunología (SEI) y jefe de Inmunología del Hospital Marqués de Valdecilla en Santander, señaló a ABC, «que se trata de un caso ya conocido y parece que son dos virus diferentes».

Por lo tanto, concluyen, la exposición previa al SARS-CoV-2 podría no garantizar la inmunidad total en todos los casos. Y advierte: todas las personas, ya sean diagnosticadas previamente con COVID-19 o no, deben tomar las mismas precauciones para evitar la infección por SARS-CoV-2.

La duración de la respuesta de anticuerpos al SARS-CoV-2 sigue siendo un tema muy controvertido. Un estudio, publicado en Nature Medicine, sugirió que los anticuerpos pueden desaparecer después de 2 meses en algunas personas con virus, pero asintomáticas. Sin embargo, la pasada semana 2 trabajos publicados en Science Immunology, constataban la persistencia de anticuerpos que se dirigen al coronavirus SARS-CoV-2 en cientos de pacientes con COVID-19 al menos 3 meses después del inicio de los síntomas.

Estas son cuestiones importantes para comprender cómo nos afectará el virus a largo plazo y pueden tener implicaciones para las vacunas e ideas como la inmunidad colectiva.

Hasta ahora, la reinfección parece ser poco común: solo ha habido unos pocos ejemplos de más de 37 millones de casos confirmados.

En España, solo se han registrado 4 casos de reinfección por COVID-19, todos en Cataluña. Los casos de Hong Kong, Bélgica y los Países Bajos no eran más graves.

Además, las implicaciones de las reinfecciones podrían ser relevantes para el desarrollo y la aplicación de vacunas. «Nuestros hallazgos tienen implicaciones para el papel de la vacunación en respuesta al COVID-19. Si realmente hemos informado de un caso de reinfección, la exposición inicial al SARS-CoV-2 podría no generar un nivel de inmunidad que proteja al 100% a todas las personas».

No está totalmente de acuerdo con esta afirmación el Presidente de la SEI. «No se puede poner en duda las vacunas si no se ha valorado la respuesta inmunitaria en la primera infección, como así ha ocurrido en este caso»

Precisamente una limitación importante del estudio, escriben sus autores, es que no «pudimos realizar ninguna evaluación de la respuesta inmune al primer episodio de infección por SARS-CoV-2. Tampoco pudimos evaluar completamente la efectividad de las respuestas inmunes (p. ej., títulos de anticuerpos neutralizantes) durante el segundo episodio».

El Dr. Marcos López Hoyos añade que las vacunas, además, inducen una inmunidad mucho mayor y específica que una infección. Además, advierte se trata de evidencias muy aisladas y, aunque asegura que van a aparecer más casos, haría falta una serie completa y bien documentada.

El estudio también sugiere que el paciente es un caso de evolución viral natural in vivo (aunque altamente improbable en vista del requisito de cuatro reversiones para genotipos de referencia), agrega, «entonces las implicaciones de estos datos son que el SARS-CoV-2 puede adaptarse con suficiente destreza genética para evitar una respuesta inmune natural de una manera para restablecer niveles detectables de infección en un individuo».

En este sentido, el inmunólogo cree que esto es muy poco probable, debido a que los virus son genéticamente diferentes y debería haber mutado en el propio paciente.

Pero si el paciente es un caso de reinfección, explican, «es crucial tener en cuenta que la inusual frecuencia, solo un caso. La ausencia de una secuenciación genómica completa de los casos positivos en EEUU y en todo el mundo limita los avances en la vigilancia de la salud pública necesarios para encontrar estos casos».

En cualquier caso, el Dr. Marcos López Hoyos subraya el mensaje de la importancia de mantener las medidas de prevención, especialmente si ya se ha pasado la COVID-19: «no sabemos si una persona inmunizada es o no portador».


Ref: ABC


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