Del 1 al 7 de agosto de 2017 se celebra la Semana Mundial de la Lactancia Materna, que fue creada por la Alianza Mundial Pro Lactancia Materna (WABA por sus siglas en inglés) y que junto a la Organización Mundial de la Salud (OMS) y al Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) la apoyan, promueven y fomentan.
Volver a los orígenes
Hace algunos años se vio una preocupante disminución de niños alimentados con leche materna. La fuerte comercialización de leches de fórmulas enriquecidas y diseñadas especialmente para recién nacidos no favorecieron que algo tan natural como alimentar a nuestro bebé con nuestra leche se sostenga. Si bien amamantar es un acto natural, requiere de tiempo, esfuerzo y apoyo para que sea exitoso.
Por suerte, últimamente estamos volviendo a los orígenes y las madres estamos cada vez más preocupadas y comprometidas en cómo dar a luz a nuestro hijo y no dudamos en que darle el pecho es el mejor alimento que tenemos para ofrecerle en sus primeros meses de vida.
Para favorecer la lactancia exclusiva durante los primeros 6 meses se recomienda iniciar el amamantamiento en la primera hora de vida, intentar amamantamiento exclusivo y ofrecer el pecho a libre demanda.
Beneficios para el niño y la madre
- La leche materna proporciona las cantidades óptimas de proteínas, hidratos y grasas y todos los micronutrientes necesarios para el bebé. Es el alimento ideal desde el punto de vista nutricional.
- Contiene probióticos (microorganismos vivos) que protegen contra enfermedades infecciosas, permiten el inicio de la maduración intestinal y confieren efectos moduladores para los sistemas inmunológico y nervioso.
- Los niños serán menos propensos a padecer enfermedades infecciosas gracias a las defensas que pasan junto a la leche, así como a padecer enfermedades crónicas ya sea en su infancia o en su vida adulta (como alergias, diabetes, hipertensión arterial, enfermedades cardiovasculares, entre otras).
- En la madre disminuye el riesgo de presentar ciertos tipos de cáncer, como el de ovarios o de mama y protege contra la osteoporosis, entre otros beneficios.
- Se favorece en ambos además un lazo emocional único.
- La lactancia materna exclusiva durante los primeros 6 meses de vida es la mejor manera de crear una microbiota saludable o flora intestinal. Hoy sabemos que esta flora se trata de una población con más de 100 billones de microorganismos con más de 1000 especies diferentes que estimula y favorece la interconexión con el cerebro. Actualmente se está estudiando cómo podría regular la función cerebral y del comportamiento.
Si consideramos los innumerables e inmejorables beneficios tanto nutricionales como extra nutricionales que brinda amamantar a nuestros hijos creo que nadie dudaría en hacer los máximos esfuerzos que estén a nuestro alcance para lograrlo.
Dra. Verónica Sabio Paz | M.N. 95.484
Servicio de Neonatología Hospital Alemán