El estudio elaborado por un grupo de físicos japoneses logró dar con algunas de las pruebas más evidentes de que todo nuestro universo, es decir, todo lo que podemos ver y tocar, sería en realidad un gigantesco holograma.
Los experimentos realizados surgieron a raíz de la sorprendente teoría del físico teórico argentino Juan Maldacena, quien hacia 1997 propuso un inquietante modelo del universo basado en cuerdas ínfimas, delgadas y vibrantes, de las que surgiría la gravedad que conocemos y experimentamos en la Tierra. El modelo de cuerdas matemáticas propone la existencia de diez dimensiones, y la que nos corresponde a los humanos de carne y hueso no sería más que un holograma, mientras que lo real sucedería en un cosmos plano, más simple y sin fuerza gravitatoria.
La Teoría de Cuerdas de Maldacena resultó ser un nexo muy atractivo para el ambiente académico, ya que propuso una conciliación sobre las inconsistencias aparentes entre la física cuántica y la Teoría de la Gravedad de Einstein. En pocas palabras, permitió a los científicos resolver problemas de un modelo que no tenían respuesta en el otro y viceversa. Sin embargo, hasta hoy, jamás había sido posible tener una prueba rigurosa sobre la validez de la teoría del argentino.
Yoshifumi Hyakutake, profesor de la Universidad de Ibaraki, en Japón, logró llevar adelante dos estudios diferentes que permitieron arribar a una prueba convincente de que la teoría de Maldacena es cierta. Por un lado, fue posible calcular la energía interna de un agujero negro, su entropía y otras propiedades, basándose en la Teoría de Cuerdas. Por otro lado, se calculó la energía interna del universo correlativo en una dimensión plana y sin gravedad. Para sorpresa de los investigadores, ambos resultados informáticos coincidieron exactamente.
Fuente: Nature