Los científicos teorizan que en el pasado distante, Marte, y su entorno, pudieron haber sido muy diferentes, con agua permanente y una atmósfera más densa.
Espectrómetro láser sintonizable, un instrumento que forma parte del análisis en el rover Curiosity de NASA.
Después de analizar los registros del Rover Curiosity que se encuentra en su misión en Marte, científicos de la NASA proponen que el planeta perdió gran parte de su atmósfera original.
Los científicos teorizan que en el pasado distante, Marte, y su entorno, pudieron haber sido muy diferentes, con agua permanente y una atmósfera más densa, informó ayer la NASA.
Esto es el resultado de una de las misiones de la NASA en este cuarto planeta del Sistema Solar, que se concentra en investigar las posibles pérdidas de la atmósfera superior, la cual es 100 veces más delgada que la de la Tierra.
Los investigadores postulan que se produjo la pérdida de una fracción de la atmósfera, cómo resultado de un proceso físico que favorece la retención de isótopos más pesados de ciertos elementos, lo que significó un factor importante en la evolución del planeta.
Los isótopos son variantes de un mismo elemento con diferentes pesos atómicos. Los resultados iniciales muestran un aumento del cinco por ciento en isótopos más pesados de carbono en el dióxido de carbono en la atmósfera en comparación con las estimaciones de cuando Marte se formó.
La ausencia de metano
Otra de las mediciones realizadas por Curiosity fue orientada a buscar la presencia de metano, que se considera como el precursor químico para la vida, difícil de detectar desde la Tierra de las naves que orbitan el paneta.
Los resultados preliminares revelaron poco o nada de metano en la región del cráter Gale donde se ha desplazado el Rover en estos meses.
A pesar de los resultados negativos, la atmósfera marciana podría contener todavía sorpresas para nosotros, declaró el científico Chris Webster, del Laboratorio de Propulsión a Chorro de la NASA en Pasadena, California.
En los primeros tres meses de Curiosity en Marte analizó muestras de la atmósfera con dos métodos de laboratorio.
Uno de ellos es un espectrómetro de masas que investiga la gama completa de los gases atmosféricos. El TLS otra parte, se ha centrado en el dióxido de carbono y metano. Durante sus dos años de misión primaria, el rover también usará un instrumento llamado cromatógrafo de gases que separa e identifica los gases. El instrumento también analizará muestras de suelo y rocas, así como más muestras de la atmósfera.