En todas tus relaciones sociales, ¿Examinas si tu mano esta abierta o cerrada?
Si tienes la mano abierta, observas con prudencia todas tus palabras, obras y pensamientos hasta por más pequeños que sean, ya que repercuten sobre todo tu entorno. Por el contrario si mantienes tu puño cerrado, se debe al orgullo que mantienes dentro de ti, no dejándote de esta forma crecer espiritualmente.

La sabiduría que posee la mano abierta, puede representarse con el gesto de crear, dar amor y esperanza. Se la asemeja al agua, porque representa la vida y se amolda a cualquier situación por mas difícil que parezca, sin forzar al recipiente a cambiar su forma, ya que la palma abierta (agua), se amolda al recipiente. El puño cerrado, en cambio, representa la piedra. La dureza del corazón. El agua, conoce a la piedra, todos sus lados, por ello el agua puede rodearla, volviéndose comprensiva hacia la piedra. La piedra, no puede rodear por voluntad al agua por eso no es comprensiva hacia ella. El agua es amorfa, se adapta a las formas, a los bordes, como también puede penetrar y fluir por donde lo desea. Ya que en su paciencia el agua que fluye y no se estanca, desgasta las durezas de la piedra.

• Cuando una mano abierta convive con un puño cerrado, la mano abierta será despreciada por el puño.
• Cuando dos puños cerrados conviven, ambos sentirán sus desprecios y no podrán convivir por mucho, alejándose el uno del otro.
• Cuando dos manos abiertas conviven, entonces el verdadero amor se encuentra. Ambas manos sienten amor y temor. Temor, para no convertir el amor en presunción y amor para no convertir al temor en cobardía, ya que al permanecer de esta manera ambas caminarán por siempre juntas de la mano.