Los astrónomos de ESO, observaron desde el desierto de Atacama, en Chile, esta singular formación oscura que se ve incluso a simple vista en la Constelación de Ofiuco.
Esta imagen muestra a Barnard 59, parte de la enorme nube oscura de polvo interestelar llamada Nebulosa de la Pipa. Fue obtenida por el instrumento Wide Field Imager instalado en el telescopio MPG/ESO de 2,2 metros en el Observatorio La Silla de ESO.
Imágenes de la oscura nebulosa de la Pipa o también llamada Barnard 59, fueron reveladas por el telescopio MPG/ESO de 2,2 metros del Observatorio La Silla, ubicado a 600 kilómetros al norte de Santiago de Chile, en el Desierto de Atacama, informó el Observatorio Espacial Europeo (ESO).
Los astrónomos de ESO reconocieron en su informe del 15 de agosto que seguramente las personas dirán
esto no es una pipa, al igual que lo exclamara el pintor René Magritte sobre uno de sus cuadros:
Esto tampoco es una pipa. El paralelo con el cuadro del pintor surge por ser el día del aniversario de su muerte, reconociéndose a su vez que es difícil dar con la boquilla de una pipa realmente.
Esta extraña nebulosa oscura se encuentra a solo 600 y 700 años luz de la Tierra en el centro de la Vía Láctea en la Constelación Ofiuco, el portador de la Serpiente o Serpentario.
Recibió el nombre de Barnard 59, por el famoso astrónomo estadounidense, Edward Emerson Barnard, que catalogó entre finales del siglo XIX y principios del XX un total de 370 nebulosas oscuras.
Primero se creía que las nebulosas oscuras eran regiones sin estrellas pero en realidad son nubes de polvo interestelar tan gruesas que bloquean la luz de las estrellas que hay por detrás.
Según los astrónomos de La Silla,
las oscuras nubes retorcidas se parecen a las patas de una enorme araña extendidas a lo largo de una telaraña de estrellas.
Tras esta primera impresión, empezará a fijarse en una serie de detalles. Formas parecidas a nubes de niebla o humo, en el centro de la oscuridad, se encienden por la formación de nuevas estrellas, agrega ESO.
Esta formación estelar es algo común en regiones que contienen densas nubes moleculares, como en estos casos donde
el gas y el polvo colapsan al unirse por la influencia de la gravedad, y cada vez se atraen más material hasta que se forma la estrella.
Aun así, comparándola con otras regiones similares, los astrónomos confirman que Barnard 59 tiene relativamente poca formación estelar y aún tiene una gran distribución de polvo.
Otra de las observaciones que hace notar ESO en la fotografía son los asteroides que se ven repartidos en la imagen como diminutas franjas azules, verdes y rojas. Estos asteroides que corresponden a trozos de roca y metal del tamaño de pocos kilómetros están en el cinturón de asteroides entre Marte y Júpiter, mientras que las nebulosas están 10 millones de veces más lejos.
Esta nueva imagen fue captada por el instrumento Wide Field Imager, instalado en el telescopio MPG/ESO de 2,2 metros, en el Observatorio La Silla.
Como los asteroides se mueven durante la exposición y crean pequeños trazos y dado que esta imagen se creó a partir de varias imágenes obtenidas en diferentes colores y en momentos distintos, los distintos trazos también están desplazados creándose las líneas.
La Nebulosa de la Pipa al completo está compuesta por Barnard 65, 66, 67 y 78, además de 59. Puede verse fácilmente a simple vista bajo buenas condiciones meteorológicas y cielos despejados, y se detecta mejor desde latitudes del sur, donde aparece más alta en el cielo, informa ESO.