Un ingeniero vuela con éxito creando sus propias alas y con la ayuda de un teléfono Android.
Por sintesisdeprensa
  
Miercoles, 21/03/2012
El vídeo podría tratarse perfectamente del próximo anuncio de la gama Android de HTC o bien un fake muy bien construido con algún software pero ciertamente parece real. Lo que vemos es la creación de un traje con alas como si se tratara de un ave, el vuelo del ingeniero holandés Jamo Smeets a partir del trabajo inacabado de su abuelo.


Y es que según cuenta el propio Smeets en Wired, el trabajo parte de la idea de su abuelo aunque luego fue modificando su fuente de inspiración. La arquitectura de vuelo la sacó del albatros, la familia de aves marinas de grandes dimensiones.

La idea como decía al comienzo surgió del trabajo anacabado que realizó en vida su abuelo. Smeets tenía en su poder bocetos de una especie de bicicleta voladora, el diseño de un artefacto que su abuelo nunca llegó a construir.


El hombre, ingeniero en la Universidad de Coventry, intentó desarrollar la física de la bicicleta. Fue en ese momento donde comenzó a inspirarse en los dibujos de las alas de Leonardo da Vinci. Luego se junto con un experto en neuromecánica para hacer realidad el diseño.

Diseño que finalmente se basa en la mecánica utilizada en prótesis robóticas, una idea donde se le da a los músculos la fuerza adicional para que pueda llevar su peso corporal durante el vuelo.

Finalmente las alas construidas hacen de prótesis de brazos muy grandes y flexibles. Dado que los brazos no podrían proporcionar la fuerza requerida para alcanzar el aleteo de vuelo, el traje requiere de una serie de motores externos (y por tanto sus brazos y pectorales sirven básicamente para orientar el dispositivo y agitar las alas).

Luego el sistema de conexión inalámbrica en las alas se controla mediante controladores de Wii y acelerómetros de un teléfono HTC Android además de motores Turnigy.


Smeets lo explicaba así:

Las alas son enormes y son de tela. Trabajar con la tela era difícil debido a su fragilidad. Por esta razón era importantísimo cocer las costuras con mucho cuidado a la vez que le daba fuerza adicional sin hacerlas demasiado pesadas.

Siempre soñé con esto, pero después de 8 meses de duro trabajo, la investigación y el primer test es una realidad con éxito.
El resultado, 60 segundos de vuelo increíbles que el hombre narraba así al finalizar:

En un momento ves como la tierra se aleja, de repente eres libre, con una sensación total de libertad. Esta es la la verdadera sensación de volar, un momento mágico, el mejor que he sentido en mi vida.
Si no lo es ya, es posible que tengamos un anuncio de HTC o Nintendo en marcha en muy poco tiempo.





Por sintesisdeprensa