El desarrollo de las nuevas tecnologías facilita muchas tareas de nuestra vida cotidiana, dando lugar a nuevas costumbres como por ejemplo las compras por Internet o la formación online. Sin embargo, no todo son ventajas, puesto que determinados estudios han revelado que el uso de Internet como herramienta puede afectar de manera muy negativa a la memoria.

Un grupo de investigadores de la Universidad de Columbia, en la ciudad de Nueva York, ha demostrado que el uso de buscadores y de bases de datos online perjudica a la memoria de los usuarios. Durante el estudio se realizaron cuatro experimentos de memoria diferentes, y todo ellos fueron publicados en la prestigiosa publicación The New York Times.

Un grupo de participantes debía introducir una palabra en el buscador, sabiendo que toda esa información se almacenaría en el ordenador, mientras que el resto de los colaboradores pensaba que esos datos no se podrían volver a recuperar para una consulta posterior. El resultado fue concluyente, ya que las primeras personas demostraron una menor capacidad de retención al saber que la información sería almacenada, frente a aquellos que pensaban que sería borrada e hicieron un esfuerzo mayor por recordar los datos.

En el estudio también se habla de la denominada memoria transactiva, aquella en la que una persona recurre a otras para almacenar datos que en un futuro pueden ser necesarios. Y como conclusión final, el diario neoyorkino concluye que la memoria de los seres humanos se está adaptando a las nuevas tecnologías de la comunicación, tal y como ha sucedido antes con la forma de comunicación de las personas y muchos costumbres. Otro ejemplo más de la presencia que tiene Internet en nuestra vida cotidiana, que condiciona desde viejos hábitos, hasta nuestras propias capacidades y habilidades, como en este caso, la memoria.