Daniel Hernández, nuevamente a cargo de Defensa Civil, se refirió a las alertas emitidas por el Servicio Meteorológico Nacional, respecto de las temperaturas altas y a la incidencia de éstas en la salud.
Se trata de un sistema de alertas sobre las olas de calor con distintos niveles, indicado cada uno con un color, que se renueva de acuerdo a las variantes climáticas y es válido para la ciudad de Buenos Aires y alrededores, entre los que nos encontramos.
Así, el color verde indica “Mínimo estado de vigilancia durante el verano.
Sin peligro sobre la salud de la población”.
El amarillo advierte que las olas de calor pueden ser peligrosas, especialmente para los bebés y niños pequeños, personas mayores de 65 años o aquellas con enfermedades crónicas. Se requiere la toma de medidas preventivas.
El naranja (ayer teníamos esta alerta con la aclaración moderado-alto) señala que las olas de calor pueden ser peligrosas, especialmente para los bebés y niños pequeños, personas mayores de 65 años o aquéllas con enfermedades crónicas y que es necesario cumplir las normas dadas por el Ministerio de Salud de la Nación frente a la ola de calor.
El alerta rojo se da en casos excepcionales de olas de calor, que pueden afectar a todas las personas saludables, y no sólo a los grupos de riesgo.
Este servicio comenzó en el verano 2009-2010 y está basado en trabajos que se realizan en el Organismo, dadas las relaciones encontradas entre temperaturas máximas, mínimas y la mortalidad diaria en la ciudad de Buenos Aires, en la última década.
El objetivo máximo a alcanzar con la implementación de este Sistema de Olas de Calor es poder anticipar a la población, con la mayor antelación posible, situaciones meteorológicas extremas y sus posibles efectos en la mortalidad, para que la misma aumente los recaudos frente a las olas de calor.
“El riesgo aumenta cuando se pasan determinadas temperaturas o un determinado tiempo con temperaturas que no bajan de los 23 grados, es decir, cuando de noche sigue tan caluroso que el organismo no puede refrescarse. Entonces, comienzan los riesgos”, dijo Hernández, que agregó “también se busca asociar los colores con las señales que la gente ya tiene incorporadas por las señalizaciones de los semáforos y las que se utilizan en las playas para advertir a los bañistas, entre otras”.
En cuanto a las acciones de Defensa Civil, Hernández dijo “básicamente, DC coordina la área de varios organismos y las alertas referidas a la salud las da el área de salud, como integrante de Defensa Civil, emitiendo comunicados acerca de los cuidados a tener dentro y fuera de casa”.
“Las alertas del SMN son un forma de apelar al cuidado propio y de quienes se tiene a cargo ante la situación climática”, resumió.
En cuanto al fin de semana, comentó que las temperaturas serán altas, con posibilidades de lluvias (que no pasarán de un chaparrón, para alegría de los prestadores turísticos y lamento de los productores agropecuarios). Estas lluvias llegarían el domingo a causa del posible choque de un frente de aire cálido y otro frío, que no provocará tormentas pero sí nubosidad que se extenderá a casi todo el domingo.
EL viento cambiará, pero las temperaturas seguirán rondando los 32º y 33º y las mínimas, entre 18º y 21º
Vale consignar un consejo dado por Hernández, acerca de cuidarse del resplandor, advertencia especialmente hecha para quienes tienen pieles sensibles.
Volviendo a las temperaturas máximas indicadas en su página por el SMN, la de hoy se ubicaría en 39º, superando los 37º de ayer. El domingo, luego de las lluvias previstas, descendería a 36º, manteniéndose inestable con probables precipitaciones. Esta temperatura se mantendría el lunes, que pasaría de inestable a parcialmente nublado.
Con lo dicho, se ratifica que hay que cuidarse del sol (eso está bastante internalizado y hoy nadie se expone sin protector o pantalla solar) y también del calor: no basta con no estar al sol. Hay que buscar lugares frescos, estar con ropa cómoda, suelta, y por supuesto, comer liviano y mantenerse muy bien hidratados.