La sonda espacial rusa Fobos-Grunt está a pocas horas de entrar nuevamente en la atmósfera terrestre, pero no de la manera esperada. Tras su lanzamiento en noviembre, la sonda que tenía como destino el planeta Marte se desvió fuera de su órbita. Ahora, sólo resta poder traerla de vuelta a la Tierra de forma ordenada y segura. ¿Se podrá?
Se trata de la nave más grande que haya producido la agencia espacial rusa, Roscosmos.
Su misión era descender sobre la luna marciana de Fobos y traer muestras de su suelo a nuestro planeta. Fallas que todavía no se pueden conocer en detalle impidieron que, una vez en órbita, la nave tomara dirección a Marte. Desde la Tierra miembros de la agencia trataron de restablecer el control de la nave, pero fue imposible.
Ya resignados acerca de la misión original, la mayor preocupación es el regreso de Fobos. Hay muchas especulaciones sobre el lugar donde caerá. Su ingresó en la atmósfera terrestre será probablemente cerca de Argentina. Pero, ¿dónde caerá?
Roscosmos informó que la sonda de 13,5 toneladas comenzaría a descender el día domingo. "Sus fragmentos se zambullirán en el Océano Atlántico", explicó una autoridad de Roscosmos en declaraciones a la Agencia rusa Interfax citadas por AFP.
Argentina, posible destino
El último gráfico indicaba que la nave caería 1.600 kilómetros al sur de Buenos Aires. El mapa anterior mostraba fragmentos de Fobos-Grunt cayendo entre la costa noroeste de Madagascar y la costa este de África.
Pero nada es seguro, de aquí al domingo, todo puede pasar. La agencia rusa dijo este jueves que la fricción atmosférica y la actividad solar aún podrían alterar la trayectoria de la nave Phobos-Grunt.
El fracaso de la nave es un tropiezo más de los rusos desde que el año pasado celebrasen los 50 años que se cumplían desde el primer viaje espacial tripulado de Yuri Gagarin. Y las reacciones han ido por el lado de las acusaciones sin destinatario.
El jefe de la agencia espacial rusa insinuó un sabotaje extranjero de sus naves cuando salieron del campo de radar ruso. "No está claro por qué los fallos frecuentes de nuestras naves se producen cuando están volando por lo que para Rusia es el lado oculto de la Tierra", dijo Vladimir Popovkin al diario Izvestia, en una entrevista publicada el martes.
"No quiero culpar a nadie, pero hay medios muy potentes para interferir con naves hoy en día, cuyo uso no puede descartarse", afirmó.
Tanto desde Roscosmos como desde la Nasa se han esforzado por relativizar la cantidad de material que finalmente llegará a la Tierra.
Otro misterio es que cantidad de restos de la nave caerán en la superficie terrestre. La caída será a altísima temperatura.
Hay que tener en cuenta que lleva una importante carga de combustible tóxico de tetróxido de dinitrógeno e hidracina por lo que los expertos esperan que arda aún en órbita. También lleva una pequeña cantidad de cobalto-57 radiactivo.
Tanto desde Roscosmos como desde la Nasa se han esforzado por relativizar la cantidad de material que finalmente llegará a la Tierra. Los rusos creen que serán alrededor de 200 kilos los que "sobrevivirán" hasta tocar tierra.
Si bien desde la Nasa no aventuraran un número, pero consideraron que dados los materiales utilizados en la nave se puede esperar que la mayor parte de su estructura arda durante la caída.
Si bien no se conocen daños a ningún ser humano por caída de material aeroespacial, siempre está la preocupación. De hecho existe un organismo que nuclea a las principales agencias espaciales del mundo. Se trata de Comité de Coordinación Inter-agencia de Deshechos Espaciales.
Vigilancia internacional
Por otro lado, está el comité de Naciones Unidas para el Uso Pacífico del Espacio Exterior. Su área de influencia va desde ser el nexo entre todas las agencias hasta el estudio de medidas para el desarrollo de la actividad espacial.
La Nasa cree que nadie fue herido jamás por deshechos provenientes de naves espaciales.
"Realmente no me quita el sueño la preocupación por la posibilidad de que deshechos espaciales atraviesen el techo", declaró Richard Crowther al diario The Guardian. "Si uno mira a la Tierra desde el espacio es mayormente agua", añadió el representante en Reino Unido de los dos organismos internacionales que vigilan el espacio exterior, queriendo restarle importancia a Fobos-Grunt
La Nasa cree que nadie fue herido jamás por deshechos provenientes de naves espaciales. Pero nadie da garantías de que eso no pueda suceder.
En los últimos meses se han sucedido otros "aterrizajes" de desechos espaciales. Después de un lanzamiento fallido el 23 de diciembre, pequeños pedazos de un satélite ruso de comunicaciones cayeron sobre localidades siberianas. En agosto, los escombros de un envío fallido de mercancía a los astronautas que están a bordo de la Estación Espacial Internacional cayeron en una zona boscosa al sur de Siberia.
En septiembre fue un satélite de la Nasa el que cayó en aguas del Océano Pacífico. De hecho la agencia estadounidense cree que alrededor de 50 piezas con un peso de una tonelada reingresan a la atmósfera terrestre cada año.
Mientras siga habiendo suerte y a nadie le caiga un pedazo de basura espacial en la será difícil contradecir el optimismo de Cowther.
Si en algún momento hubiese que lamentar un herido las agencias internacionales y el Comité de la ONU probablemente propondrán medidas para evitar esta suerte de ruleta rusa espacial, donde nadie quiere garantizar donde dará el disparo.
Fuente: BBC