> Está pensado para dispositivos domésticos como móviles o tablets.
> Aprovecha la banda de los terahercios del espectro electromagnético, poco usada.
> Con un coste de un euro, planean fabricarlo masivamente en unos años.
El fabricante de semiconductores japonés ROHM ha hecho pública toda la información sobre un nuevo chip de reducido tamaño en el que están trabajando junto con la Universidad de Osaka, que es capaz de transmitir información de forma inalámbrica a altas velocidades: más de 1 gigabit por segundo. En las pruebas de su "wifi de alta velocidad del futuro" aseguran haber alcanzado 1,5 Gbps, lo que sería todo un récord para este tipo de dispositivos: comparativamente sería diez veces más veloz que el wifi más rápido de la actualidad, basado en el estándar 802.11n (unos 150 Mbps).
La tecnología empleada se basa en la utilización de ondas en la banda de los terahercios, una zona del espectro electromagnético no tan conocida ni utilizada como otras en la actualidad. Similar a las bandas de radio, TV o de luz visible, en esa banda era hasta ahora más complejo y caro generar y detectar las señales que se emitían y recibían, de ahí que apenas se usara.
Pero gracias a un nuevo diseño de antena se ha podido crear un detector de reducido tamaño (3 milímetros por 1,5 milímetros) con el que transmitir y recibir de forma práctica y económica datos usando dicha banda.
Al igual que otras ondas de radio, televisión o Wi-Fi, las ondas que viajan a terahercios atraviesan sin problemas materiales sólidos como el papel, la ropa, los cuerpos o las paredes; los únicos lugares donde encuentran obstáculos son los metales y el agua.
El coste de fabricación sería de un euro la unidad
El resultado es un nuevo chip en el que hay componentes como los llamados "diodos resonantes de efecto túnel" y una pequeña antena, capaz de emitir y recibir información a 1,5 gigabits por segundo. Y lo mejor de todo: su coste de fabricación sería de un euro la unidad, lo que permitiría aplicarlo a prácticamente cualquier dispositivo sin un aumento exorbitado en el precio.
Entre las aplicaciones de este tipo de chips están los aparatos que habitualmente utilizamos en los wifi caseros, tales como routers, teléfonos móviles, tabletas y similares, que ahora podrían conectarse entre sí o con otros dispositivos del hogar tales como equipos de música o televisores para transmitir mucha más información. En la práctica, supondría poder transmitir sin cables contenido de vídeo de alta calidad en tiempo real no solo en televisores FullHD, sino también en los HD 4K de superalta definición que ya existen o sincronizar dispositivos sin cables en un abrir y cerrar de ojos.
El fabricante está convencido de que «estrujando» un poco más la misma tecnología y la capacidad de la banda de los terahercios podrían conseguir velocidades de hasta unos 30 Gbps, lo cual supondría casi multiplicar por 40 la capacidad de los wifi actuales.